Se cree que la colonización bacteriana prenatal y temprana desempeña un papel importante en la configuración del sistema inmunitario. Además, la evidencia acumulada vincula las exposiciones tempranas de la vida con el riesgo de desarrollar enfermedad inflamatoria intestinal (EII) más adelante en la vida. El objetivo fue evaluar el efecto de la EII materna en la composición del microbioma durante el embarazo y en el microbioma de la descendencia.

Examinamos prospectivamente la diversidad y la taxonomía del microbioma de mujeres embarazadas con y sin EII y sus bebés en múltiples puntos de tiempo. Evaluamos el papel del diagnóstico materno de EII, el modo de parto, el uso de antibióticos y el comportamiento de alimentación en la composición del microbioma durante la vida temprana. Para evaluar los efectos de la microbiota materna e infantil asociada con la EII en el sistema inmune entérico, inoculamos ratones libres de gérmenes (GFM) con las heces respectivas y las poblaciones de células inmunes adaptativas e innatas en el intestino murino.

Las mujeres embarazadas con EII y sus descendientes presentaron una menor diversidad bacteriana y una composición bacteriana alterada en comparación con las mujeres control y sus bebés. La EII materna fue el principal predictor de la diversidad de microbiota en el intestino del lactante a los 7, 14, 30, 60 y 90 días de vida. Los bebés nacidos de madres con EII demostraron enriquecimiento en gammaproteobacterias y reducción en bifidobacterias. Finalmente, la GFM inoculada con heces de madre e IBD del tercer trimestre y heces infantiles de 90 días mostró una diversidad microbiana significativamente reducida y menos células B de memoria con cambio de clase y células T reguladoras en el colon.

La composición errónea de microbiota intestinal persiste durante el embarazo con EII y altera la diversidad y abundancia bacteriana en las heces infantiles. La microbiota disbiótica desencadenó una impresión anormal del sistema inmune intestinal en la GFM.

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